Pasion Handball crece

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viernes, 7 de octubre de 2011

Orgullo


Ayer se planteaba una misión imposible, el Ivry que está recién armándose jugaba contra el Montpellier. El conjunto de Karabatic es el mas poderoso de la Liga y su plantel está armado no para ganar la LNH si no para pelear la Champions League, si bien la Liga de Francia es una competencia que cada vez cobra mayor jerarquia y competitivida se da lo que en países como Eslovenia con el Celje o Croacia con el Zagreb, esto es un equipo con mayor presupuesto, plantel y poderío que el resto.

En estas circunstancias y como si fuera poco sin Diego Simonet el conjunto parisino salía a la cancha con la difícil tarea de aguantar a los hermanos Karabatic y al mágico de Guigou entre otras figuras.

A los diez minutos el partido estaba empatado 4-4 , y durante toda la primera parte el Ivry puso lo que hay que poner para plantarse frente a un coloso del Handball mundial. Sebastián Simonet tuvo una gran actuación, aportó tres goles y dió mucho juego. Como siempre el mayor de los Simonet juega muy bien, inteligente y sin perder pelotas, a veces da la sensación que tiene 10 años mas de los que realmente dice su DNI.

Faltando quince minutos para concluir el Montpellier no conseguía despegarse y el marcador rezaba 19-21. Había varias caras de preocupación del lado de los poderosos. Pero en ese momento se produjo el quiebre y   el Montpellier metió un 8-0 de parcial.
Cabe destacar que el Handball al igual que el Basquet tienen una cierta lógica, donde la diferencia de plantel, el recambio y la calidad de los jugadores con el correr de los minutos se hace sentir. En general cuando se enfrentan dos equipos con realidades diferentes suele ganar el mejor, pero lo hermoso del Handball y del deporte en general es lo que se dio ayer. Un equipo diezmado (sin Diego Simonet ni Dominikovic) dejando todo, jugando de igual a igual y sin resignarse un segundo, ni empatando ni perdiendo por diez.

Y lo mejor de esa actitud del Ivry es que el abanderado de esa actitud, de esa entrega, fue Seba Simonet, un chico que con cualquier camiseta demuestra todo su valor, su coraje y por supuesto su nivel de juego.

La nota positiva es que ambos hermanos llegarán bien a Guadalajara y en este momento están volando a nuestro país. Luego de una gran actuación ahora a meterse en los Juegos. Gracias Seba por tu talento y tu entrega, los compatriotas que jugamos al handball nos sentimos orgullosos.

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