La final del Mundial Junior quedó en manos de Alemania, el campeón defensor. Los teutones accedieron a esta instancia superando trabajosamente a Egipto y mostraron ser un equipo muy solido.
En un partido atípico por la diferencia final, el resultado final fue 27 a 18, los alemanes hicieron valer su dura defensa y su capacidad de correr de contra.
Digo partido atípico y podríamos decir de "resultado mentiroso" si se quiere, ya que el descanso los teutones llevaron una diferencia de 13-10 (para nade definitiva ni amplia) y a los 13 minutos de la segunda parte los daneses lograron igualar el juego en 15, de ahí pasaron a un 17-16 y luego se desmoronaron hacia un 22-17 que se fue tornando definitivo.
Por otra parte Túnez superó claramente a Egipto por 24 a 18, en un partido donde se comprobó que los encuentros por la medalla de bronce son algo aparte, diferente. Estoy convencido que en los partidos que deciden el tercer puesto es mucho más decisiva la capacidad de recuperarse pronto y bien de la frustración que implica perder la semi final que lo hecho por ambos conjuntos en el torneo hasta el momento.
Egipto se presumía mas fuerte, jugó un partido épico ante quien resultó campeón del mundo perdiendo tan solo por un gol, sin embargo nunca estuvo en partido y siempre fue dominado por Túnez quién obtuvo una histórica medalla de bronce.
Es la primera vez que este encuentro se decide entre dos países no europeos, veremos si esta evolución en Junior puede plasmarse en mayores en el próximo Mundial.
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